Elida Lucino Merino es de San Pedro Amuzgos, Oaxaca, un pueblo de tejedores. Comenzó a aprender los conceptos básicos sobre el telar de cintura a la edad de nueve años. Primero, comenzó a aprender cómo hacer la urdimbre y unirla al telar. Luego, a los 12 o 13 años, hizo su primera pieza de puro algodón blanco con figuras llamadas memelitas. Para cuando tenía 18 años, ella estaba haciendo huipiles tradicionales con grecas moradas.

Elida formó un grupo de amigos llamado La Tejedora Antigua, que con el tiempo se ha convertido en un grupo unido y trabajador. de artesanos que trabajan continuamente en nuevos diseños, utilizando tintes naturales, conscientes de mantener viva su cultura y tradición amuzgos al mismo tiempo.

El telar de cintura es engañosamente simple. Consiste en palos, cuerda y una correa que se coloca alrededor de la cintura del tejedor. Esta correa es como el telar de cintura recibió su nombre. Esta tecnología simple significa que casi cualquier persona puede tener un telar de cintura y que el telar se puede instalar en casi cualquier lugar. Esta movilidad le permite a la tejedora trabajar adentro o afuera, en la casa de un vecino o en el mercado, mientras cuida a los niños. Y el telar de cintura se puede ajustar para adaptarse a cualquier tejedor, desde el niño que aprende a tejer hasta un maestro tejedor adulto.

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