Roberto Castro Hernández es un maestro calderero de Santa Clara del Cobre Michoacán, un pueblo que se ha especializado en la fabricación de cobre durante cientos de años y ha ganado reconocimiento internacional durante el último siglo. El trabajo de Roberto es sobresaliente. Ha desarrollado sus propias técnicas de pátina, una propiedad que resalta la profundidad y gama de colores posibles en el cobre. Comenzó a tocar y trabajar con metal cuando tenía diez años y pronto empezó a experimentar con diferentes técnicas. A medida que fue adquiriendo experiencia, se convirtió en creador de sus propias piezas. Su hermoso trabajo es uno de los más distinguidos de la región. Sus primos continúan la tradición de preservar los diseños únicos de la familia.

Roberto ha participado en numerosas exposiciones y su arte en cobre ha sido admirado y premiado. Ha obtenido numerosos premios en los últimos Concursos Nacionales; durante dos años consecutivos fue invitado al Festival de Arte Popular de Santa Fe en Santa Fe, Nuevo México, como representante del arte del cobre mexicano. Su trabajo es apreciado y frecuentemente solicitado por arquitectos e interioristas que trabajan en la construcción mexicana contemporánea, una nueva expresión arquitectónica basada en la preservación de la mexicanidad a través de la innovación. Las piezas de Roberto se exhiben en hoteles de todo el país.

En el trabajo de Santa Clara del cobre, cada pieza se fabrica a mano utilizando el método utilizado durante siglos, martillando una sola hoja de cobre para darle forma sobre una forja en caliente. Luego se recalienta la pieza y se sumerge en agua muy fría para conseguir tonos óxidos rojizos. La obra está decorada mediante estampación. En este arte se utilizan una gran cantidad de herramientas: cinceles, alicates, pinzas, tijeras, punzones, mazos y martillos de todo tipo y peso. La materia prima se compra en diversos lugares donde se encuentran residuos de cobre que se desechan constantemente, procedentes de piezas de automóviles y cables.

Dado que el cobre de las piezas de Roberto se deja en su estado natural, requiere un cuidado mínimo. La pátina protege la superficie de la oxidación, por lo que no es necesario pulirla. Si la pieza se ensucia se puede lavar con agua y jabón.

Santa Clara del Cobre, Michoacán

434 343-0833

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